"Si pensaban en una ciudad dormitorio a este gobierno le salió muy bien" - A32 Noticias

Lo Último

banner de cabecera

Post Top Ad

Tu fuente confiable de información

sábado, 7 de septiembre de 2024

"Si pensaban en una ciudad dormitorio a este gobierno le salió muy bien"

En una entrevista exclusiva, Sebastián Ameigeiras habló de su militancia, su compromiso social y político. EL concejal de Marcos Paz tiene futuro no se guardó nada. 

¿Cuánto tiempo hace que te recibiste?

Hace ya más de 20 años.

¿Cuándo te diste cuenta de que lo tuyo era ser un médico con un fuerte enfoque social?

Fue antes de estudiar medicina. Después de terminar el secundario, comencé la carrera de abogacía, pero pronto tuve una crisis familiar que me llevó a dejar la universidad y buscar trabajo. Trabajé como peón de alambrador en Las Heras, y más tarde en Pilar, donde conocí a una persona que me inspiró a seguir estudiando porque vio en mí la capacidad de representar a los trabajadores. Retomé el CBC para abogacía, pero un encuentro con un médico que trabajaba en José C. Paz cambió mi rumbo definitivamente hacia la medicina. 

Ese médico trabajaba en un asentamiento, atendiendo en un centro comunitario, y me invitó a acompañarlo. Mi primera tarea fue tomar la presión a los ancianos. Ver su labor y el compromiso con la comunidad me llevó a decidir que quería seguir su camino.

¿Cómo empieza tu militancia política y cómo te vinculas con el peronismo?

Mi militancia no comenzó en los años 90, porque en ese momento, bajo el nombre del peronismo, se estaba entregando la patria. Lo que a mí me entusiasmó fue ver la realidad cruda de los asentamientos y la pobreza estructural que aún persiste. En el centro comunitario, me encargaron trabajar con los jóvenes en situación de vulnerabilidad. Fue una experiencia que me conmovió y me hizo entender la importancia de estar al servicio de los demás.

En los años 90, la dirigencia política estaba más orientada hacia la comunidad. Las mujeres eran las referentes y sostenían las crisis, mientras que muchos hombres caían en el alcoholismo. Esa época me dejó una marca profunda y me mostró la reserva moral que representan esas mujeres y abuelas que sostienen a la sociedad en los peores momentos.

¿Cómo ves la salud pública actualmente, en especial en las áreas más vulnerables?

Hay muchas similitudes con la situación de 2001 y los 90. La pobreza, la desocupación y el desfinanciamiento son problemas persistentes. La pandemia de Macri, seguida por la del COVID, y un gobierno que tuvo dificultades para dar respuesta, empeoraron la situación. Ahora, con las políticas actuales, se ha incrementado la pobreza debido a la devaluación y la pérdida de empleos. 

El sistema de salud pública está desfinanciado y desorganizado. Los profesionales están concentrados en las grandes ciudades y las especialidades con un perfil más humanitario, como la pediatría y la medicina general, son cada vez menos elegidas por los estudiantes. Además, el sistema está sobrecargado, ya que mucha gente que pierde su obra social termina dependiendo del sistema público.

¿Cuál sería la solución para la crisis en la salud pública?

La solución pasa por la planificación y una adecuada financiación del sistema. Necesitamos que los nuevos profesionales se entusiasmen con la salud pública, lo cual requiere no solo de una buena formación y compromiso, sino también de salarios adecuados y condiciones laborales justas. Es fundamental que haya una conducción estratégica desde el Ministerio de Salud para poder organizar y articular todo el sistema.

¿Qué rol tiene la educación y la formación en la salud pública?

La formación es clave. En el pasado, existía una mayor planificación y dirección en la educación de los profesionales de salud, con un enfoque hacia la medicina comunitaria y la atención en contextos vulnerables. Hoy en día, se necesita recuperar ese compromiso con la comunidad y garantizar que quienes estudian en la universidad pública devuelvan algo a la sociedad, trabajando en los lugares que más los necesitan durante un tiempo determinado.

Tomando en cuenta todo lo que manifestaste: ¿Cuál es tu evaluación del estado actual de Marcos Paz?

Estamos atravesando una crisis muy importante en Marcos Paz. Llevamos 20 años con el mismo gobierno, y eso es demasiado tiempo para cualquier gestión. Lo que vemos es un gobierno que intenta pensar a Marcos Paz como ese pueblito de campo de quince mil habitantes que fue cuando yo era chico, pero ya no somos eso. Ahora somos el tercer cordón del conurbano, con 80.000 personas, y estamos muy atrasados respecto a lo que debería haber pasado en estos 20 años.

¿Cuáles son las principales falencias que observás?

Hay muchas áreas críticas, pero uno de los ejemplos más claros es la salud. La población se triplicó, y los centros de salud en los barrios no. Seguimos con un hospital municipal muy precario, sin una carrera sanitaria organizada. Se sostiene más que nada por la voluntad y la humanidad de los trabajadores, pero es un sistema que quedó obsoleto. La carrera hospitalaria es fundamental para darle organicidad y eficiencia al sistema, con jefes de servicio que gestionen y organicen los recursos. En Marcos Paz, eso no existe, y no es un problema que se pueda atribuir solo a los últimos cuatro años; son 20 años sin avances significativos.

¿Qué otros ejemplos podrías dar de esta falta de progreso?

Otro tema son las fuentes laborales. Marcos Paz tiene un parque industrial que se inauguró cuatro veces, pero ¿dónde están las fuentes de trabajo? Un joven de 18, 20 o 30 años, ¿a dónde va a trabajar? Hay muy pocas fábricas, algo de empleo público y algunos comercios en el centro. Si el proyecto en estos 20 años fue ser una ciudad dormitorio, bueno, en eso se tuvo éxito. Pero eso no es lo que hicieron otras ciudades cercanas como Cañuelas o Las Heras. Incluso Moreno, con todos sus problemas, en los últimos tres años inauguró tres parques industriales.

¿Qué pensás sobre la distribución del presupuesto municipal?

Si el problema es el presupuesto, entonces hay que discutir cómo se utiliza. En el balance de 2023, por ejemplo, encontramos que una cantidad importante de dinero se usó para pagar a punteros que realizaron encuestas falsas en época electoral. Se gastó en pagos a personas que no reflejan la realidad social que se supone debían documentar. Si hay dinero para eso, permitime cuestionar cómo se está usando la plata y por qué no se invierte en áreas críticas como salud o infraestructura.

Desde el oficialismo, la respuesta suele ser: "Hacemos lo mejor que podemos". ¿Cuál es tu respuesta a eso?

Mi pregunta es: ¿hacemos lo mejor que podemos? Los problemas que tenemos no son solo en salud. Tenemos un parque industrial sin impacto real, una comisaría que hace falta en la parada Ricardo Cal, donde debería haber una delegación municipal que descentralice la gestión, una sala de salud con especialidades y una guardia con una ambulancia. Hace 20 años, quizá no tenía sentido, pero ahora, con la población que tenemos, es esencial. Marcos Paz quedó estancado en términos de gestión y crecimiento.

¿Cómo ves el futuro inmediato y cuál es tu rol en esta situación?

Mi rol en el futuro inmediato es seguir trabajando en el Concejo Deliberante, visibilizando las injusticias y lo que está haciendo el gobierno con los diferentes sectores. Es nuestra responsabilidad como representantes. En el Concejo estamos presentando proyectos y dando las discusiones necesarias, aunque es un desafío constante cuando no se tiene mayoría. Ahí es donde se ve la importancia de ganar elecciones para poder conducir y tomar decisiones. Podés tener el mejor proyecto, pero si el oficialismo decide cajonearlo, se convierte en una estrategia para que no avance nada que no provenga de ellos.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Post Bottom Ad

Comprometidos con la verdad